Empresarios se niegan; argumentan que depende de la Bolsa de Valores de Nueva York
Édgar Escamilla
Productores de café en la zona centro del estado se reunieron con representantes de la empresa Agroindustrias Unidad de México S.A. de C.V. (AMSA), quienes negaron la oportunidad de mejorar los precios del aromático, por lo que ahora buscarán el respaldo del Gobierno Federal .
Luego de tres horas de diálogo entre caficultores del municipio de Ixhuatlán del Café y el gerente de AMSA, Fracisco Faus Sotelo, la empresa negó la posibilidad de un incremento al precio del grano, toda vez que éste se determina por la Bolsa de Valores de Nueva York y los costos de producción propios de la compañía.
El lunes pasado, el grupo de productores pretendían realizar una movilización, incluida la toma de carreteras, para mejorar las condiciones de los precios, luego de un año en el que la cotización ha sido a la baja.
Con la gestión de la alcaldesa de Ixhuatlán, Viridiana Bretón Feito, y de Gerardo Rosales Victoria, enlace de la Secretaría del Bienestar en Córdoba, se logró concretar una solicitud al Gobierno Federal para lograr mejoras para el sector, incluidas políticas públicas relacionadas con la cadena productiva, fijar un precio de garantía, la revisión del programa “Producción para el Bienestar” y la integración de pequeños productores al programa “Sembrando Vida.
Los productores piden también un seguro para contingencias ambientales, la actualización del padrón cafetalero, financiamiento y la regularización de la pequeña propiedad, una comercializadora, promover la denominación de origen y que se incluye el café en la canasta básica.
De acuerdo con la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC), del pago que reciben los productores, cerca de la mitad se destina al proceso de producción, por lo que las ganancias son mínimas.
En la Sierra de Zongolica, el precio de café cereza al productor es de entre 6.50 y 6.80 pesos.
En la reunión con el representante de AMSA expusieron que el beneficio del café está afectando al río Jamapa y a los mantos acuíferos de la zona, por lo que le exigían que la empresa fuera socialmente responsable y comprometida con el medio ambiente.
Luego de tres horas de diálogo sin acuerdo alguno, los productores optaron por retirarse de la mesa de negociación y emprender gestiones ante el Gobierno Federal, así como buscar una nueva empresa comercializadora dispuesta a mejorar el precio del producto.