¿Qué pensarías si tu médico te recomendara beber alcohol y café y no preocuparte del sobrepeso para que logres vivir por más tiempo? Puede parecer una broma de mal gusto, pero una investigación (real) llevada a por científicos del Instituto Irvine para Deterioros de la Memoria y Trastornos Neurológicos de la Universidad de California desde el 2003 así lo demuestra.
Investigadores encontraron una constante entre aquellas personas que habían bebido cantidades moderadas de alcohol o café: vivían más que aquellos que se abstuvieron.
The 90+ Study es el nombre del proyecto realizado desde el 2003 y en el que han participado más de 1,400 personas, según la ficha técnica publicada en el sitio oficial de la UCI MIND (por sus siglas en inglés), disponible en el enlace: http://www.mind.uci.edu/research-studies/90plus-study/
Como parte del estudio, los participantes son visitados cada seis meses por los investigadores, quienes les realizan pruebas neurológicas y neuropsicológicas, obteniendo además información sobre la alimentación, actividades, historial clínico, medicamentos consumidos, entre otros. Participan además en pruebas cognitivas y físicas para determinar el estado de salud.
El estudio tiene como objetivos principales el determinar los factores asociados con la longevidad, conocer la epidemiología de la demencia senil, examinar las tasas de deterioro cognitivo y funcional de las personas con mayor edad, así como las correlaciones entre diversas enfermedades que afectan a la población de ancianos.
Además del consumo de alcohol y café como claves de la longevidad, los investigadores han encontrado que las personas con sobrepeso mayores de 70 años también vivían por más tiempo en comparación con los ancianos de talla dentro de los parámetros normales o de bajo peso.
Descubrieron también que 4 de cada 10 personas mayores de 90 años presentan demencia y casi 8 de cada 10 están discapacitados, siendo más común entre las mujeres que en hombres.
Encontraron además una relación estrecha entre el gen APOE2 y el Alzheimer. Las personas que cuentan con este gen tienen menores posibilidades de desarrollar esta enfermedad, pero tienen más probabilidades de presentar una neuropatología de Alzheimer en el cerebro.
¿Interesante? Pues el grupo de investigadores del 90+ Study están buscando nuevos participantes. Así que si tienes 90 años y estas dispuesto a recibir la visita de los científicos dos veces al año y lo mejor, aceptar donar tu cerebro para investigar lo que ocurre después de su muerte, en el enlace que dejamos líneas arriba puedes recibir mayor información.
¡Todo sea por el avance de la ciencia!