En 2006 fue creado el Centro de las Artes Indígenas, institución de formación Totonaca, en Papantla, Veracruz. Desde entonces ha cosechado reconocimientos por su labor de regeneración cultural. Tras una consulta a los Abuelos y creadores Totonacas que se preguntaban cómo regenerar y difundir la cultura local, surgió Xtaxkgakget Makgkaxtlawana / El esplendor de los artistas como respuesta a la necesidad por enseñar la tradición Totonaca. Comenzó, así, la creación de las Casas-Escuela de Tradición, a través del nacimiento del Kantiyan o la Casa Grande.
La fecha de hoy, obligada en la agenda de los promotores culturales, artistas e instituciones recuerda como el 4 de diciembre de 2012, el Comité Intergubernamental para la Protección del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura lo incluyó en la Lista Mundial de Buenas Prácticas de Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial.
Fue así, como hace siete años se oyó la virtuosa flauta de los Voladores a cargo de Víctor García Castaño y se escuchó en Totonaco la palabra sabia del abuelo Gregorio Bernabé (QEPD) en Paris, Francia.
En cada una de las casas-escuela se vive un proceso de enseñanza-aprendizaje del arte Totonaca, mediante el uso de la lengua madre. De este modo se posibilita la recuperación de técnicas tradicionales, la producción artística, el restablecimiento de los órganos tradicionales de gobierno y la reforestación de insumos vegetales —plantas y árboles— necesarios para las prácticas culturales.
Los maestros tradicionales, autoridades educativas y estudiantes celebran los logros del Centro a nivel nacional e internacional.