Se cumplen 51 años de su muerte
La Habana, Cuba.- Este día se recuerda en diversas partes del mundo especialmente en Latinoamérica, la muerte de Ernesto «Che» Guevara, legendario guerrillero argentino cubano, que formara parte del grupo expedicionario que partiera desde el puerto de Tuxpan a bordo del yate Gramna, para iniciar la revolución de la isla, alcanzando el grado de comandante. Siendo asesinado a la postre el 9 de octubre de 1967 en la Higuera, Bolivia, luego de ser capturado en la batalla de Quebrada del Churo.
Inspirador de respeto, admiración o temor, el «Che» Guevara se ha convertido en todo un mito; su imagen, captada por el fotógrafo Alberto Korda, se ha convertido en un ícono mundial del movimiento contracultural, siendo utilzada lo mismo con fines artísticos, publicitarios o culturales.
En la Habana, Cuba, el Museo de la Revolución muestra parte de los objetos y la ropa que portaba el guerrillero durante la revolución, así como una gran cantidad de fotografías e inclusive una estatua de cera, acompañado por Fidel Castro en acción de combate.
Médico de profesión, durante su estadía en México trabajó como alergista e investigador en el Hospital General y en el Hospital Infantil, además de que fue fotógrafo de la Agencia Latina. Aquí se casó con Hilda Gadea, con quien procreo a su primogénita Hilda Beatríz Guevara.
En el 2012, durante la 21a. Edición de la Feria Internacional del Libro, realizada en la fortaleza de San Carlos de la Cabaña, se presentó el libro «Cien poemas al Che», que reune la obra de escritores como José Lezama Lima , Julio Cortázar, Pablo Neruda, Thiago de Melo, Efraín Huerta, León Felipe, el ruso Evstuchenko o Salama el Tawil de Egipto, por citar algunos autores.
Al triunfo de la revolución, Guevara estableció su comandancia en la fortaleza de San Carlos de la Cabaña, supervisando los fusilamientos de partidarios del derrocado dictador Fulgencio Batista. En el lugar, se conserva su despacho, de piedra al igual que el resto de la construcción, decorado con duelas de madera.
Se conservan los muebles de la época, entre ellos el escritorio que utilizaba el guerrillero, así como otros objetos, como teléfonos.
De acuerdo con algunos testimonios de personas que convivieron con el «Che», se trató de una persona sanguinaria, que muchas ocasiones realizó ejecuciones sin juicio previo, pero también fue un líder que predicó con el ejemplo, trabajando con sus propias manos y guiando a sus compañeros.
Este día se llevan a cabo homenajes en Santiago de Cuba, Argentina y la propia Bolivia, donde fue muerto en 1967 y sus restos permanecieron en exhibición pública durante dos días en Valle Grande, siendo enterrados de forma clandestina; hallados supuestamente en 1997.
El cuerpo del guerrillero yace en Santa Clara, Cuba, en el memorial donde descansan los restos de la mayoría de los expedicionarios.
Texto e imágenes: Édgar Escamilla
Publicada originalmente en octubre del 2013.