El libro con más traducciones en la historia es «El principito» de Antoine de Saint-Exupéry, a lo largo del tiempo se ha trasladado a más de 382 idiomas. Por su parte, el libro escrito por un mexicano con más traducciones es «Pedro Páramo» de Juan Rulfo, pues ha sido publicado en más de 35 idiomas, según Preply, plataforma de aprendizaje de idiomas online. Alrededor de mundo existen más de 150 millones de títulos, pero solo algunos trascendieron la barrera idiomática y se han publicado en más de 30 idiomas.
De acuerdo con información compartida por Preply para NotiPress, solo un libro de autoayuda figura en este listado: los 21 mandamientos morales de «El camino a la felicidad» de L. Ronald Hubbard pueden encontrarse en 112 idiomas. Esto lo convierte en el libro de América del Norte con mayor cantidad de traducciones.
En el otro polo del continente, hay una gran cantidad de obras de ficción cuyas historias han sido trasladadas a otras lenguas. «Cien años de soledad», de Gabriel García Márquez, «El Aleph», de Jorge Luis Borges y «2666», de Roberto Bolaño, tienen más de 30 traducciones cada uno. Sin embargo, el título en Sudámerica que presume tener la mayor cantidad de versiones es «El alquimista», de Paulo Coelho, con más de 80.
En el caso de Europa, la literatura infantil es el género más traducido, incluido «El principito»; no obstante, ninguno lo alcanza en cantidad de publicaciones en otras lenguas. Algunos cuentos populares como «A Life in the Woods» de Felix Salten, «Alice’s Adventures in Wonderland» de
Lewis Carrol, «Las aventuras de Pinocho» de Carlo Collodi, y «Pippi Longstocking» de Astrid Lindgren, cuentan con más de 200 traducciones, no muy por debajo de la historia del Antoine de Saint-Exupéry.
Las autobiografías son el género que más exportado por África, sin embargo, la obra más traducida también es una fábula infantil «The Upright Revolution: Or Why Humans Walk Upright», de Ngũgĩ wa
Thiong’o, pasó del suajili a otros 35 idiomas.
Asia ha dado a uno de los autores de ficción más leídos a nivel global, «Tokio Blues» de Haruki Murakami tiene traducciones en más de 33 idiomas. Si bien, Oceanía ha dado pocos autores conocidos a nivel mundial, libros como «The Thorn Birds», de Colleen McCullough cuentan con más de 20 traducciones.
Los libros, ya sea traducidos o en su idioma original, tienen diferentes beneficios al aprender un idioma. Además de mejorar la comprensión lectora en otra lengua, ayudan a retener nuevas palabras, conocer expresiones comunes, e incluso tener acercamiento hacia otras culturas.
NotiPress/Juan Manuel Flores