viernes, noviembre 22

Qué efectos tendrá La Niña para el clima de América Latina

Tras meses de estar en la fase neutra de El Niño/ Oscilación del Sur (ENSO), comenzó a manifestarse el fenómeno oceánico-atmosférico conocido como La Niña en otoño del 2021. Se espera que este fenómeno, el cual ha surgido por segundo año consecutivo, dure hasta principios de la primavera de 2022. Fuertes inviernos y sequías impactarán a Latinoamérica y según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), hay 87% de probabilidades de que La Niña perdure desde diciembre de 2021 hasta febrero de 2022.

El pasado 1 de junio de 2021, La Niña llegó a su fin después de varios meses de afectación, de acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Pronósticos de septiembre de 2021 de los Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM indicaban posibilidades del 60% de que surgieran las condiciones para una temporada neutra. Contrariamente a lo esperado, la temperatura superficial del océano es más fría que la media en el centro y este del Pacífico, lo cual denota el comienzo de este fenómeno.

Según el Comité Regional de Recursos Hidráulicos (CRRH), el ENOS consiste en tres fases: El Niño, La Niña y la fase neutra. La Niña es la fase opuesta a El Niño y se refiere a un enfriamiento de la masa oceánica del Pacífico ecuatorial, lo cual genera múltiples variaciones climáticas. Expertos meteorológicos notaron el resurgimiento del fenómeno gracias a las temperaturas debajo del promedio del océano Pacífico, anormalidades en el nivel de los vientos tanto en el este como en el oeste y anomalías térmicas en el Pacífico ecuatorial.

La Niña surge de dos maneras distintas en América Latina, ya sea con lluvias abundantes e inundaciones en los países de Ecuador, Brasil y Colombia o por el contrario, con fuertes sequías como lo experimentan Argentina, Perú, Chile y Bolivia. En México se sospecha que la temporada de lluvias se extenderá hasta finales de noviembre de 2021, con condiciones como precipitaciones intensas y un invierno muy seco.

Actualmente no se cuenta con la suficiente información para formular un pronóstico certero, pero NOAA prevé que este año La Niña tendrá una intensidad moderada. En 2020 se registró un potencial fortalecimiento de este fenómeno, con sequías en América del Sur, potentes lluvias en Centroamérica y una duradera temporada de huracanes del Atlántico. No obstante, aunque se esperan ciertos patrones similares, ningún suceso de La Niña se manifiesta de la misma manera.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.