El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) por las nuevas tareas asignadas al Ejército mexicano, que incluyen seguridad pública, control migratorio y construcción de obras.
El secretario de la Defensa Nacional participó en la ceremonia del aniversario del Ejército en Coahuila, estado donde se promulgó la creación del Ejército constitucional el 19 de febrero de 1913.
Sandoval defendió la “evolución” de las tareas del Ejército, que en el Gobierno de López Obrador se han ampliado a mantener la seguridad pública, interceptar a migrantes, administrar aduanas y construir obras emblemáticas como el Tren Maya y el aeropuerto Felipe Ángeles que servirá a Ciudad de México.
“Todo mandato que nos sea asignado en el marco de nuestras visiones contará con el compromiso y capacidades de todos los miembros de esta institución”, indicó el secretario de la Defensa.
El Ejército ha recibido críticas de organizaciones defensoras de derechos humanos por la participación de militares en la detención de migrantes, presuntos nexos con el narcotráfico y la supuesta responsabilidad de militares en desapariciones y ejecuciones extrajudiciales.
Pero López Obrador reiteró que “las acusaciones” en el sentido de que su Gobierno está “militarizando al país carecen de toda lógica y de la más elemental buena fe”.
El presidente justificó que “el soldado es pueblo uniformado y por eso nunca traicionará a su gente”.
“En el ámbito latinoamericano, e incluso en el mundial, las Fuerzas Armadas de México son excepcionales en varios sentidos: nunca han pertenecido a la oligarquía. Soldados y oficiales vienen de abajo, y tienen como origen e identidad el México profundo”, sostuvo.
Aunque los homicidios en México se han mantenido por encima de los 33,000 en los tres años que van del Gobierno de López Obrador, las cifras más altas de la historia, el presidente aseveró que se ha contenido la delincuencia gracias a las Fuerzas Armadas.
Además, agradeció la “lealtad” de las Fuerzas Armadas mientras su Gobierno afronta ataques de “los conservadores corruptos”.