Lo lamentable con la aprobación de la Guardia Nacional (GN) es que diferentes grupos como Seguridad sin Guerra crean que fue un triunfo sobre los militares.
Con sus pancartas y sonrisas sobre un triunfo, que simplemente no existe, creen que vencieron a la militarización, cuando en realidad lo que siempre han confundido es a ésta con la acción militar en beneficio del país; por tanto, no fue un triunfo.
A quien se debe vencer es a los criminales.
Los criminales son quienes violan derechos humanos, son quienes producen verdaderas víctimas en México. Los criminales son quienes imponen los toques de queda, ellos son quienes abusan arrebatando las propiedades y negocios de mexicanos de bien.
Los criminales son asesinos y mercenarios.
Lo que nadie puede escatimar es el triunfo legislativo y político alcanzado el jueves con la GN. En esto radica una de las esencias importantes de la GN, es decir, a pesar de que falta la aprobación final en la Cámara de Diputados y de ahí los congresos estatales, la realidad es que sí habrá Guardia y esa para muchos mexicanos es una excelente noticia.
La otra mitad de este esfuerzo es sin duda su operatividad y efectividad. El miedo infundado era el de la militarización; sin embargo, aun y a pesar de todos los esfuerzos que emprenda la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana para el inicio de operaciones de la GN, sin el Ejército y la Armada, el camino se hará por mucho más largo.
No se puede omitir que es de mutua confianza la relación entre el general Sandoval y Alfonso Durazo, por lo que la puesta en marcha de la GN será soportada por una tutela militar.
¡Ojo! No es militarización. En todo caso es aprovechar las capacidades militares que darán el soporte necesario para reclutar, adiestrar, adoctrinar, disciplinar y, sobre todo, convertirla en una verdadera institución de Estado.
La sorpresa ayer fue que existe la posibilidad legal de que sea un soldado o marino el jefe de la Guardia.
La sorpresa ayer, si bien la GN será una institución civil, los militares encontraron en la propuesta aprobada la tan necesaria certidumbre jurídica para seguir apoyando a las autoridades en tareas de seguridad interior; sin duda es un gran avance para la legalidad de las operaciones militares en este sentido.
Falta la creación de la Ley Orgánica de la GN, ya que con ella se le podrá dar la fortaleza necesaria para que quienes la integren tengan la seguridad de una ruta profesional de largo plazo; también de que cuenten con todos los servicios de seguridad social, por supuesto ascensos y recompensas.
Como bien lo dijo ayer el secretario Durazo, esta Guardia Nacional será una institución de excelencia.
Toque de silencio
Nuevamente una pregunta que ya se está siendo recurrente cuando matan a un militar, ¿quién llora por él?
Desde este espacio nuestras condolencias y solidaridad con la familia del jefe Barrientos. Sin duda, sacrificó su vida por su país y los mexicanos que defendía el pasado jueves en Michoacán.
¿Quién más está dispuesto a hacerlo?
¿QUIÉN LLORA POR ÉL?.
jibarrolals@hotmail.com