El presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó a los secretarios del Gobierno Federal, directores de empresas u organismos paraestatales y a los servidores públicos en general no permitir la corrupción, influyentismo, amiguismo o nepotismo que caracterizaron al viejo régimen.
A través del oficio Presidencia-016/06/13/19, el mandatario mexicano recalcó a sus colaboradores que todos están obligados a honrar su palabra y cumplir con los compromisos de no mentir, no robar y no traicionar la confianza de los mexicanos.
No acepto, bajo ninguna circunstancia, que miembros de mi familia hagan gestiones, trámites o lleven a cabo negocios con el gobierno en su beneficio o a favor de sus recomendados, reiteró.
En el documento con fecha del 13 de junio, el Presidente puntualizó que tales indicaciones incluyen a su esposa, hijos, hermanos, hermana, primos, tíos, cuñados, nueras, concuños y demás familia cercana o distante.
No tienen la obligación de escuchar propuestas indecorosas de nadie. Y en el caso de mis familiares, ni siquiera de recibirlos en sus oficinas o contestarles el teléfono. Nada de nada, insistió.
El presidente López Obrador expuso que en caso de que alguno de los funcionarios mencionados no cumpla con la recomendación o incurra en tales conductas podría caer en actos de deshonestidad y en la esfera del derecho penal.