Poza Rica, Ver.- Policías Estatales y empleados del Ayuntamiento se enfrentan durante operativo para el retiro de comerciantes ambulantes en el primer cuadro de la ciudad, luego de que el amparo solicitado por los mercaderes fuera sobreseído por un Juez Federal, quien determinó que la autoridad municipal era la única responsable de otorgar o no los permisos para la actividad comercial en la vía pública.
Este 11 de abril, en el que los comerciantes ambulantes deberían de retirarse de la vía pública según un acuerdo que data de la pasada administración que instrumentó el programa “Jueves sin Ambulantes”, personal de la Dirección de Desarrollo Económico y Fomento al Empleo, procedieron a invitarlos a retirarse de manera voluntaria.
Al no atender la indicación, los empleados municipales procedieron a redactar las actas correspondientes en las que se indica la multa a la que han sido acreedores por desacatar a la autoridad, así como un registro de las mercancías que fueron decomisadas para que los propietarios se presentaran a reclamarlas.
La mayor parte de la jornada se llevó a cabo de manera ordenada a pesar del descontento de los comerciantes, quienes alegaban su derecho a ejercer un trabajo de manera lícita y la necesidad de llevar un sustento a sus respectivas familias.
Sin embargo, el orden se rompió cuando dos elementos del Agrupamiento Motorizado de la Policía Estatal se presentaron en el lugar donde se retiraba uno de los puestos semifijos, tratando de impedir que los empleados municipales cumplieran con su comisión.
Esto encendió los ánimos entre los comerciantes y transeúntes, quienes comenzaron a grabar los hechos, argumentando que se estaba cometiendo una arbitrariedad.
Los oficiales estatales solicitaban hablar con el responsable del operativo, pero en el lugar no se encontraba ninguno de los directores municipales que deberían estar involucrados: German Galindo, director de Fomento Económico y Aaron Betanzos Zumaya, director de Prevención del Delito.
En su lugar, los inspectores del ayuntamiento mostraron un oficio de comisión firmado por el subdirector de Fomento Económico, José de Jesús Luna Kuri, quien tampoco se encontraba en el operativo. Cabe señalar que dicho documento carecía del sello oficial de la citada Dirección Municipal.
Luego de dialogar con otros policías que a distancia acompañaban el operativo, los dos oficiales se retiraron sigilosamente, dejando un conflicto entre los ambulantes y los empleados municipales.
Amparos perdidos
El operativo fue organizado por el Ayuntamiento luego de que un Juez federal dictaminara improcedentes las solicitudes de amparo presentadas por varios comerciantes ambulantes para ser retirados de la vía pública.
En febrero de este año, la regidora comisionada en Comercio, Vanessa Balderas Sánchez, informó que la justicia federal había negado los amparos, determinando que el Ayuntamiento era la única entidad con la facultad para otorgar o no permisos para realizar actividades comerciales en la vía pública.
A través de un escueto comunicado, el Gobierno de Poza Rica informó que “Atendiendo los reclamos de la ciudadanía para liberar vialidades del primer cuadro de la ciudad el día de hoy se procederá a retirar a vendedores ambulantes que se han asentado en la vía pública para la venta de frutas y verduras, accesorios para celulares y ropa.”
Y agrega que “Algunos de los comerciantes que serán retirados han solicitado el amparo de la justicia federal contra la autoridad municipal, sin embargo estos amparos han sido sobreseídos, aun así han aprovechado para establecerse de manera desordenada, por lo que se les invitará nuevamente que despejen la vía pública.”
Sin embargo, la medida no se aplicó por igual en todo el centro de la ciudad, como se pudo constatar en un recorrido realizado por las calles y avenidas, donde se encontró a personas comerciando productos arriba citados, así como puestos de comida callejeros, los cuales además violan disposiciones en materia de Protección Civil, así como de Tránsito y Vialidad.
Operativo descoordinado
Desde las 08:30 horas del jueves, empleados del Ayuntamiento procedieron a realizar el operativo para retirar a los comerciantes ambulantes, acción presuntamente coordinada con las áreas de Tránsito y Vialidad, Protección Civil, Prevención del Delito y la Policía Estatal.
El operativo no fue encabezado por ningún funcionario municipal, por lo que los empleados se encontraban trabajando solos, acompañados por dos policías a bordo de una patrulla desde la que vigilaban a distancia.
El presidente municipal Francisco Javier Velázquez Vallejo se encontraba en un evento con la ciudad de México, acompañado de la Síndico y dos regidoras, según se constató por una fotografía publicada por la diputada Lizeth Guerra. Este jueves se había suspendido también el programa de Gobierno de Puertas Abiertas de atención a los ciudadanos.
La desorganización quedó evidenciada cuando los oficiales de la Policía Estatal trataron de impedir, por desconocimiento de la medida, que los empleados retiraran a los comerciantes y sus mercancías, alentando a estos últimos a no acatar la disposición del Ayuntamiento.
Édgar Escamilla